El viaje de Córdoba a Lima fue un poco caluroso, pero si tenemos en cuenta que a las 2am tenía que estar en el aeropuerto y que salio recién a las 5 podrán suponer que no dormí nada y que caí rendida ni bien toqué el asiento... casi me pierdo el despegue!!!
El vuelo de Lima a Miami fue más largo, pero venía más vacio así que me cambie de asiento y viajé sola todo el trayecto, en detrimento de un pobre pibe que pensó que no iba a tener que soportar a alguien adelante reclinando el asiento! Quienes realmente me conocen saben que soy inquita. Cada vez que me movia el asiento se iba para atrás, así que el pobre flaco no debe haber podido ver ni media película.
El trayecto de 5 horas lo aproveché para ponerme un poco más al día con la filmografía de Woody Allen: Blue Jazmine. Altamente recomendable.
Ya en Mimai pasé por la aduana y como me pasa cada vez que voy al super mi fila fue la más lenta!!!
El hotel en el que me alojé es realmente lindo: habitaciones grandes, con camas gigantes y un tele smart para conectar el pen drive y escuchar la música que me gusta. Espacio ideal para bailar al ritmo de Living Color descalaza y sin pantalones!
No estoy ubicada en una zona muy centrica, ni estoy cerca del mar, por lo que mi plan de pasear por Miami Beach ens rollers y tanga se vio fraguado antes de empezar.
Una vez instalada lo primero que hice fue chicarme de frente con un bagle, que era básicamente una de las cosas que más extrañaba de Estados Unidos!
Hoy, viernes, salí en busca de una notebook, ya que encontré unas megas ofertas en Best Buy. Como no pensaba gastar USD$50 en taxi me vi en la difícil lucha de usar el transporte público en Estados Unidos. Quienes hayan viajado por acá sabran la odisea que es el colectivo... Tienen mala frecuencia y como casi nadie los usa es dificil encontrar información.
En la recepción del hotel me dieron indicaciones, pero no eran muy buenas que digamos. Arranqué mal: me tomé el colectivo que era, pero en la dirección equivocada!
Por suerte me pude bajar rápido y volverme en la dirección correcta.
El chofer que me tocó fue super amabla. Y gracias a dios lo fue, porque llegando a la terminal amablemente me explicó que estaba bastante lejos de mi destino final y que encima era bastante peligroso ir caminando en esa dirección. Luego me introdujo al fantástco mundo de los shuttles en Miami.
La ciudad tiene tres lineas de colectivos gratuitos que hacen recorridos en circulo por diferentes rutas. En menos de tres convinaciones estaba en Best Buy con mi nueva compu en los brazos. Aproveché para pasear por el Maimi International Mall y creo que me merezco una palamda en la espalda ya que entré a Forever 21, Victoria Secret y algunos locales más y aún conservo mi cash!
Lo más llamativo de todo Miami es que después de un día y medio sigo sin topare con americanos: puros cubanos por todos lados! Si el acento fuera hereditario me estaría casando con un cubano ya mismo para tener un hijito que hable así.
La experiencia de viajar en un shuttle con 5 cubanos no se puede transmitir. O si... para aquellos que hayan estado por La Escuelita compartir un colectivo pequeño con 5 cubanos es como escuchar las clases de bateria por unas 3 horas... Son escandalosos!!!
Ah! También me tocó una cubana ruidosa en el primero colectivo. La señora peleaba por teléfono porque alguien le había cancelado el trasnsporte y no le había querido cargar dos bolsas. DOS BOLSAS! Y lo enfatizo, porque es lo que repitio a los gritos durante un buen rato! Me hubiese gustado sacarle una foto, porque era un personaje bastante pintoresco, pero por las dudas no lo hice...
Mañana a las 9 me buscan para ir al barco, veremos que onda con eso... Hasta ahora las mini vacaciones fueron geniales... No me dejaran hacer solo esto por los 8 meses????
